21 de mayo de 2007

TRANSPLANTE CORRECTO

Antes de nada hay que escoger el período más adecuado, para que la planta no se resienta demasiado del cambio de lugar y se recupere rápidamente. Dependiendo de la especie, el mejor período para el trasplante va de finales de la primavera a finales del verano o comienzos del otoño.

Los recipientes de bonsái tienen agujeros en el fondo que impiden que se estanque el agua y permiten oxigenarse al aparato radicular. Antes de iniciar la operación, por tanto, es necesario poner sobre el agujero una malla que permita el paso del agua y el aire pero que, a la vez, evite que el sustrato utilizado para el trasplante pueda escapar al exterior.

La secuencia fotográfica de esta página muestra cómo preparar el alambre ligándolo a la malla del fondo del contenedor; éste será después usado para reafirmar las raíces, dando estabilidad a la planta. Si se trata de un bonsái de grupo utilizaremos el alambre sólo para los árboles más voluminosos, mientras que los otros ejemplares se sujetarán a los primeros (siempre mediante hilos). Este anclaje se eliminará cuando el bonsái haya desarrollado un aparato radical suficiente (unos 5-6 meses después del trasplante).

Se cortan cerca de 40 cm de alambre (la longitud dependerá del recipiente usado y de la distancia existente entre los agujeros) que sirva para el anclaje (ǿ 1-1,5 mm) y se enrosca en torno a un trozo de varilla metálica (ǿ 4-5 mm) dejando dos extremos de la misma longitud.

Desde abajo, se introduce el alambre entre los agujeros de la malla y, girando el recipiente, hacemos que se adhiera al fondo disponiéndolo diametralmente. Ahora podremos introducir en el recipiente la primera capa de tierra.

Una fase importante y delicada de la operación de trasplante es la limpieza y examen de las raíces de la planta con la que se trabaja. Hay que distinguir cuáles eliminar porque estén muertas o se hayan engrosado en exceso y resulten embarazosas (véase fotografía de abajo).

Una vez limpias las raíces, se pone el bonsái en el recipiente. Para el ejemplar fotografiado se usó un recipiente oval, pero también puede utilizarse de otras formas. En el caso de un recipiente con otra forma, hay que prestar especial atención en esta fase al «frente del bonsái», es decir, al lado desde el que lo ve quien lo observa.


Ahora, con gran delicadeza, anclaremos con el alambre el aparato radical de la plantita, recubriéndolo en su totalidad con tierra, y después regaremos.



Autor: Priscila Gonzalez

Fuente: Wikilearning

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Jo. que gráfico.

Excelente.

Un saludo.

Juan Pablo barquin dijo...

buenas, que tal? quiero saber a cerca del transplante de una especie que en santiago del estero llamamos "palo borracho". ¿es propicia esta epoca para el transplante? ¿que riesgos existen? por favor, si es que se puede, contestenme a mi mail. juampibarquin@hotmail.com desde ya muchas gracias!

TodoBonsai dijo...

Juan Pablo, como dice el post, se puede hacer tranquilamente. Solo tené en cuenta esas recomendaciones y si cortas muchas raíces tené la precaución de podarlo un poco de hojas, así compensás.
Despues de terminar fijate que no le de mucho sol, sobre todo en donde vivis que es realmente agobiante.
Una vez que pase 1 o 2 semanas (andá mirandolo) y si lo ves que respondió bien, volvelo a su original ubicación.
Espero que haya sido de ayuda.
Saludos