Ficha: JUNIPERUS
De la familia de las cupresáceas, consta de multitud de especies muchas de ellas utilizadas como bonsai. Algunas de las más comunes son:
- Juniperus Chinensis, Enebro de China: dentro de los chinensis existen multitud de variedades, pero quizá una de las más apreciadas por lo compacto de su follaje sea el Juniperus Chinensis Sargentii, nativo del Japón.
- Juníperus Rigida, Enebro de las Pagodas: Nativo del Japón, su principal característica es el follaje de forma acicular, resistente y muy punzante. La ramificación tiene tendencia a ser colgante.
General:
El Juniperus Chinensis es una conífera de origen chino que si bien en lugar de origen puede alcanzar los 25 metros de altura, las variedades implantadas en Europa no suelen hacerse muy altas.
El aspecto de su follaje va a variar con la edad pasando de unas agujas puntiagudas, largas y de color claro para plantas jóvenes, a pequeñas escamas para árboles adultos. Es más, un mismo ejemplar puede presentar los dos tipos de follaje simultáneamente. El tronco y las ramas son muy flexibles presentando una corteza rugosa de gran atractivo. Una tendencia natural de este tipo de árboles es formar troncos extremadamente sinuosos en los que la presencia de maderas muertas no es nada infrecuente, pudiendo quedar en muchas ocasiones poco más que una veta viva alimentando a todo el follaje.
El Juniperus Rigida es una conífera originaria del Japón, Corea y Manchuria. De porte bajo, puede alcanzar alrededor de los 10 metros de altura. Sus ramas con colgantes recubiertas de un follaje acicular muy rígido, de ahí su nombre, y fino. Al igual que en su pariente el chinensis, la presencia de maderas muertas no es nada infrecuente en su medio natural.
Condiciones de cultivo:
Situación: Se trata de árboles muy tolerantes respecto al clima que prefieren estar situados a pleno sol. Soportan bien el frío aunque el Rigida puede variar el color de sus acículas a un tono pardo en caso de fríos intensos.
Riego: Abundante y regular. Les gusta el agua y su falta puede ser motivo de que un chinensis desarrolle aguja juvenil, mucho menos atractiva que la escama madura.
Abonado: Abonado en los periodos activos; primavera y otoño. Con mayor intensidad en otoño.
Trasplante: Cada 2 o 5 años en primavera, en función de la edad de la planta. El sustrato puede ser la mezcla normal, por ejemplo akadama mas volcánica.
Poda: Es necesaria una constante labor de despuntado, en ocasiones casi diaria, de los brotes nuevos durante toda la estación de crecimiento. Nunca deben usarse tijeras en esta operación, se debe hacer con los dedos.
La poda propiamente dicha puede llevarse a cabo casi en cualquier momento pero conviene evitar el invierno.
Propagación: Raramente por semillas, excepto quizá en los rigida, lo habitual es utilizar esquejes en verano.
Plagas y enfermedades: Cochinillas y araña roja puede que sean las plagas más habituales en este tipo de árboles, aunque tampoco sería raro encontrar pulgón. Conviene mantener un cierto grado de humedad ambiental, pulverizando si se hace necesario, durante las épocas más calurosas para prevenir el ataque de la araña roja. También puede padecer enfermedades como royas y “desecamiento de coníferas” producido por un hongo. Los síntomas son el secado de las agujas empezando por el extremo. Inicialmente puede afectar únicamente a una rama, pero a menos que se aplique el tratamiento adecuado se extenderá con rapidez para acabar matando la planta con total seguridad.
Estilos más adecuados: Se adapta perfectamente a casi cualquier estilo.
Comentarios:
Los juníperos, por lo menos alguna de sus variedades, son uno de esos árboles que no suele faltar en casi cualquier colección. Los ejemplares suelen llamar poderosamente la atención por sus atractivos jins y sharis combinados con vetas de madera viva.
Si bien no son árboles especialmente complicados de cultivar, su mantenimiento si es laborioso para evitar que la planta pierda la forma. Se hace necesaria una casi continua labor de pinzado y en este caso, los trabajos de alambrado son fundamentales para formar correctamente el bonsai. Puede hacerse necesario repetir el alambrado una y otra vez a lo largo de varios años para que la planta mantenga definitivamente la forma deseada.
Autor: Sergio Yagüe
1 comentario:
Una aclaración, el juniperus como todas las coníferas soportan bien la sequía, no me parece acertado aconsejar riego abundante, algún principiante podría al leer esto confundirse y matar la planta.
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